viernes, 18 de febrero de 2011

PARA LEER Y PENSAR

MANIFIESTO:
Con la escaza organización que tiene la CORRIENTE DEMOCRÁTICA(incluyendo a Caldas) se hace imprescindible que definamos estrategias que eviten que los esfuerzos que hagamos se pierdan en función de los aprovechamientos que hagan diversos candidatos y grupos que pueden ver en nosotros “terrenos baldíos disponibles para colonizar”.
Cuando se me pregunta por la posición de la CORRIENTE DEMOCRÁTICA frente a candidatos, a las alcaldías, por ejemplo, yo insisto en la diferencia entre laCONSTRUCCIÓN DE AGENDAS PROGRESISITAS y los APOYOS a candidatos de otros grupos o partidos. Eso no tiene misterio. Se puede hacer, en especial cuando no tenemos candidato.
En esos casos se me ocurre que lo que hacemos es ofrecer el concurso de nuestra acción política en función de una propuesta que sabemos que no es nuestra, de la que no debemos esperar más de lo realmente posible, pero que si logramos incrustar algunas de nuestras propuestas (que sepamos que ellos no las han propuesta, claro) nos ubicaremos en la posición de CONSTRUCTORES DE OPORTUNIDADES, no de avaladores de prácticas o componendas politiqueras.
Para mi será claro que ese candidato no es nuestro, que su agenda no es nuestra responsabilidad, que respaldamos lo nuestro dentro de su propuesta, y lo de él que nos parezca,  y que no esperaremos más de lo que hayamos concertado. Eso nos releva de responsabilidades y respaldos más allá de lo expuesto.
Esa posición es, en últimas, la que se propuso en Bogotá el 1 y 2 de Diciembre, la que acordamos en Manizales el 5 de Diciembre. Esa posición no es personal ni optativa, es colectiva y deberemos asumirla como tal.
Por eso es evidente que como integrantes de un Colectivo deberemos ser, por lo menos, claros en nuestras posiciones: o estamos en la CORRIENTE DEMOCRÁTICA y actuamos de en consonancia con ella, o nos pasamos para la campaña del otro candidato, o nos matriculamos en el otro partido,  y cuando termine la campaña electoral volvemos a reunirnos como los amigos que somos.
Corremos un riesgo, propio de la democracia, cuando hablamos de seres libres, de ejercicios autónomos y de comunicación como los tres ejes centrales de la propuesta de nuestro colectivo, reforzados con el acompañamiento del que tanto hablamos, que tanto pedimos y que nos comprometemos a ofrecer en la medida de las posibilidades.
El reconocimiento de la autonomía del otro para ejercer su poder podría ser asumido, por los que no lo entiendan o por aquellos mal intencionados, como un aval para que el que quiera haga lo que le de la gana. Y que actúen por conveniencia personal pero en nombre de la CORRIENTE, desconociendo lo concertado o, peor aun, actuando en función de conveniencias personales o de otros grupos, y en perjuicio del Colectivo de la CORRIENTE DEMOCRÁTICA.
No son extrañas en estas épocas las ofertas por los respaldos, las seducciones para los apoyos, las mimetizaciones amparadas en la inclusión.
Tampoco podemos asumir la función de jerarcas de la ética para decir si esa persona está actuando con transparencia o no. Su intención no es objeto de discusión. Pero nuestros actos sí nos deberán permitir definir la claridad con la que asumimos el tránsito por la construcción de la CORRIENTE.
La CORRIENTE tiene cuerpo propio. No necesitamos estar en la ASI o en el Partido Verde, o en Cambio Radical para expresarnos como CORRIENTE. Esa no es la idea. O somos de la CORRIENTE o somos de esos otros grupos, lo cual no limita, para nada, la posibilidad de que construyamos juntos AGENDAS PROGRESISTAS.
Lo que se ha propuesto es que, desde la CORRIENTE podemos construir con ellos, y con los que quieran, AGENDAS PROGRESISTAS que nos incluyan y los incluyan, y que nos permitan participar en un movimiento amplio que le de más fuerza a nuestras propuestas.
Pero eso es diferente a que la CORRIENTE, por no tener personería, sea terreno de todos y del que quiera aprovechar lo que hemos construido, y menos en beneficio de otros intereses diferentes a los que se hayan concertado.
Para todos debe ser claro, digo yo, que le apostamos a construir AGENDAS PROGRESISTAS desde la CORRIENTE DEMOCRÁTICA. Si la idea es estar en otros grupos o partidos no necesitan “meterse” a la CORRIENTE para establecer puentes. Quien no esté claro en eso mejor que se pase para el otro grupo, movimientos o campañas (que de paso se puede decir que son casi todas) que ofrezcan mejores posibilidades que las que tenemos en la CORRIENTE. Ese es su posibilidad, su derecho y su decisión.
Y yo la apoyo.

JULIÁN MEJÍA BOTERO
COLECTIVO CORRIENTE
DEMOCRÁTICA CALDAS